¡Disfruta de tu sexualidad en todas las etapas de tu vida... y sí, también durante el embarazo!
Sabemos que tener relaciones durante el embarazo puede ser algo que asuste a muchos padres y/o madres primerizxs o a parejas que se estén planteando ampliar la familia. Preguntas como si se puede dañar al bebé o hasta si se le puede llegar a tocar durante la penetración, pueden echaros atrás a la hora de probarlo... Se puede seguir teniendo una vida sexual activa y placentera, pero siempre recomendamos que antes consultes con tu ginecólogx, especialmente si tu embarazo es de riesgo. ¡Os invitamos a seguir leyendo y resolver todas vuestras dudas!
¿Hay algún riesgo en el sexo en el embarazo?
En un embarazo normal, se puede tener sexo perfectamente y no tiene que ser nocivo. De todas formas, consulta tu caso concreto con tu ginecólogx y sigue sus recomendaciones.
Esto puede ocurrir si hay amenaza de aborto, hemorragia genital (independientemente de la causa), embarazo múltiple, incompetencia cervical, riesgo de sufrimiento fetal, rotura prematura del embarazo, presencia de otras enfermedades, medicamentos...
En el resto de casos, para disfrutar del sexo durante el período de gestación, solo hay que adaptar algunas posturas a partir del segundo trimestre para evitar que sean dolorosas o incómodas para la persona embarazada. Y no, no se tocará el bebé con el pene o con el juguetito.
Deseo sexual durante el embarazo
Las fluctuaciones en el deseo sexual durante el embarazo son totalmente normales. Piensa que hay muchos cambios físicos y hormonales que afectan a nuestras ganas de tener sexo. Así que tanto si tu deseo sexual está por las nubes como si está bajo tierra, no te preocupes, es algo que irá variando y probablemente tengas días de todo. Cada embarazo es un mundo y el deseo sexual varía en cada persona y a lo largo de la vida.
Del mismo modo, el deseo sexual de tu pareja también puede ir variando. Los cambios, los miedos lógicos del embarazo, la futura paternidad y sus implicaciones son detonantes para nuestro estado de ánimo. Así que, si te preocupa, no dudes en hablar con tu pareja e incluso con profesionales de la salud mental de cómo te sientes ¡la comunicación es lo más importante!
Juguetes sexuales durante el embarazo
Los juguetes sexuales se pueden usar siempre y cuando nuestrx ginecólogx no diga lo contrario. Lo ideal sería usar nuestros juguetes sexuales habituales y no usar ninguno que nos incomode, nos duela, o nos moleste. Puede que no sea el mejor momento para probar nuevos juguetes, sobre todo si son para la estimulación de la vagina o son muy grandes.
Normalmente, durante el embarazo apetecen más juguetes sexuales que estimulen el clítoris y/o la parte externa de la vulva, así como otras zonas erógenas como los pechos o cualquier parte de nuestra piel.
De hecho, antes del parto los juguetes pueden ser beneficiosos para darle elasticidad y dilatación a la vagina, aunque es importante comentarlo con tu ginecologx u obstetra para que nos aconseje cómo y cuándo hacerlo.
Cómo cambia el sexo durante el embarazo
Primer trimestre del embarazo
En esta etapa, algunas personas olvidan sus relaciones sexuales porque están muy concentradas en su embarazo, sobre todo cuando es el primer bebé. Es importante no dejar de lado a la pareja y continuar manteniendo relaciones sexuales satisfactorias individuales y en pareja.
Es muy común perder un poco de interés en el sexo durante el primer trimestre de embarazo ya que los vómitos, las náuseas o el malestar provocan inapetencia. Pero recordad que el sexo es como el deporte: cuanto más se practica, más ganas se tiene de seguir haciéndolo y, en cambio, si se deja de hacer cuesta más volver a ponerse.
El sexo oral y la estimulación del clítoris pueden ser muy satisfactorios para la mayoría y son buenos aliados para recuperar la excitación y las ganas de tener sexo.
Las relaciones sexuales en este trimestre no son peligrosas y solo se debe tener cuidado en caso de que exista riesgo de aborto.
Segundo trimestre del embarazo
En el segundo trimestre, muchas personas embarazadas ya se han acostumbrado a la nueva condición y suelen tener más relaciones sexuales. Además, el cambio hormonal que conlleva el embarazo provoca una mayor sensibilidad a la excitación y mucha más lubricación.
El único problema es que con la barriguita puede haber algunas limitaciones en las posturas y el repertorio erótico tiene que cambiar un poco.
Una de las mejores es la postura California. Es una postura que, permite realizar la penetración cómodamente y con mucho más control. Además, la barriga no impide el contacto.
Otra opción es We found love. Aunque si la barriga es muy grande va a ser un poco más complicado, el contacto directo con la pareja permitirá que os sigáis encendiendo con besitos y caricias y reafirmará el amor que sentís.
La postura Umbrella puede ser muy recomendable durante el embarazo. Consiste en hacer el perrito reclinándose un poco para atrás con las piernas abiertas. De esta forma se evita la compresión abdominal y es cómodo para ambxs.
| En estas posturas y debido al embarazo, es mejor realizar movimientos calmados, nada violentos. Para sentir al máximo la estimulación, podéis jugar con accesorios como el anillo vibrador Todo Mío, que os permitirá disfrutar de una estimulación externa además de la penetración, sin necesidad de grandes movimientos. |
Aparte de estas nuevas posturas y juguetitos para ampliar el repertorio, se recomienda enfatizar en la estimulación de todo el cuerpo y no focalizarse únicamente en los genitales. Disfruta de toda la relación sexual e incluye caricias y masajes por todo el cuerpo.
En el segundo trimestre solo se prohíben las relaciones sexuales si hay amenaza de aborto o si hay historial de embarazos anteriores con incompetencia del cuello uterino.
Tercer trimestre del embarazo
A partir de las 38 semanas hay especialistas que recomiendan abstenerse de relaciones sexuales ya que puede provocar dolores e incomodidad o incluso un parto prematuro en algunos casos. Por otra parte, si el parto se retrasa, también pueden recomendar tener orgasmos para acelerarlo.
Por supuesto, se pueden seguir teniendo mimos, besos, caricias, masturbación, etc., pero se desaconsejan las penetraciones profundas y el sexo intenso.
Consúltalo siempre con tu ginecólogx para que valore cada caso personalmente. Normalmente se tienen más ganas de mimos que de sexo, a causa de la incomodidad que pueden provocar los cambios físicos (esa barriguita no es fácil de manejar) y la proximidad del parto.
Atracción durante el embarazo
El embarazo es como una crisis simbólica en la pareja, pasar de ser dos a tres tiene sus implicaciones y hay que seguir trabajando en el deseo sexual de la pareja.
Ser unx más cambia la manera de relacionarse en la pareja porque cambian las obligaciones, responsabilidades, intereses y preocupaciones.
Está claro que durante el embarazo es importantísimo cuidarse como futuros papás y mamás, pero también es importante seguir cuidando la relación de pareja al margen de la parentalidad.
En la embarazada puede cambiar el concepto sobre su imagen corporal, sobre todo en los primeros embarazos donde puede cambiar mucho el físico y ser impactante para ella o su pareja.
Hay que hablar sobre las dudas o preocupaciones que se derivan a causa del cambio físico, piropear a la pareja, decirle lo que le gusta y enfatizar en los cambios físicos a mejor. Las personas embarazadas muchas veces se ven más guapas fruto de su felicidad, los pechos se engrandecen… La barriga es posiblemente uno de los cambios más evidentes durante el embarazo y hay que aprovecharla, ¡que solo dura 9 meses! Se puede incluir la barriga en el repertorio erótico: acariciarla, besarla, pintarla, chuparla o hasta masajearla con algún aceite para que esté bien hidratada y no salgan estrías…
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El atractivo de la pareja no tiene que estar solo en el físico, sino también en cómo nos divertimos, qué cosas nos gusta hacer juntxs o de qué manera nos entendemos. Por eso es tan importante sacar tiempo para seguir pasándolo bien con la pareja y seguir construyendo proyectos de futuro.
